Los niños que presencian violencia doméstica son aquellos que son sometidos a escenas de violencia doméstica y/o a los resultados de esta violencia, ya sea por :
- Observaciones directas
- Observaciones indirectas (escuchar palabras y comportamientos sin estar en la habitación)
- Exposiciones a los resultados de la violencia:
- Al constatar los malos tratos sufridos (contusiones, lesiones)
- Notando los daños en la casa
- Por la visita de la policía
- Al observar el comportamiento de sus padres (llanto, desánimo, etc.)
Se ha demostrado que los niños expuestos a la violencia doméstica experimentan graves dificultades y que sus síntomas son comparables a los de las víctimas contra las que se dirige la violencia.
De hecho, muchos niños que presencian violencia muestran comportamientos como:
- Ataques físicos o ataques indirectos a otros.
- Trastornos emocionales
- Échale la culpa a ellos, cúlpate a ellos mismos.
- Hiperactividad, problemas de aprendizaje, dificultad para concentrarse en la escuela.
- Cometer delitos contra la propiedad
- Ser violento con los hermanos menores, las mascotas y posteriormente con los padres.
- Problemas de inadaptación psicológica, social, cognitiva, física y conductual.
- Menor nivel de habilidades sociales.
- Mayor tasa de depresión, preocupación y frustración.
- Sufrir problemas relacionados con el estrés.
- Mostrar niveles más bajos de empatía
- Perpetuar el ciclo de violencia en su futura relación.
Parece que los niños tienden más a exteriorizar sus reacciones:
Mientras que las niñas tienden a internalizar sus reacciones:
- Depresiones
- Miedos
- Síntomas somáticos